El Sendero "Camino de las Moriscas-Castillejo" es un antiguo camino de herradura, que comunica Abrucena y era usado por agricultores, por ganaderos, para trashumancia y pastoreo y por comerciantes de aceite y otros productos y que se ha recuperado y adaptado en su recorrido para hacerlo circular y posibilitar el disfrute de unos espléndidos países,
donde los animales de la naturaleza y del senderismo pueden disfrutar de la riqueza de nuestro paisajes, flora y fauna. Se encuentra señalizado para posibilitar su recorrido sin pérdida, aunque falta colocar paneles informativos, instalar miradores, etc...
Se trata de un sendero circular, de aproximadamente 5 km, que se realiza íntegramente por vereda. La Plaza de Andalucía es la salida y la llegada. Se inicia el recorrido por la Calle del Agua, casco antiguo de la localidad, en la que se encuentra un antiguo Molino Harinero de principios del siglo XX recientemente restaurado. Sin abandonar esta calle, se llega a la Jairola, por donde caminaremos junto a la Acequia del mismo nombre, construida por nuestros pobladores musulmanes en el medievo y que se sigue utilizando en la actualidad. Casi en su inicio se pueden contemplar los restos de un antiguo Acueducto sobre un Túnel excavado en la piedra que desemboca en el mirador de la Jairola, desde donde podemos observar una bella estampa de Sierra Nevada y de nuestro Castilllejo y las clásicas huertas escalonadas.
A 700 metros pasaremos por la Piedra del Barreno, donde se produce un estrechamiento de la vereda, que con la elevación del terreno junto al río, produceuna sensación algo vertiginosa. A pocos metros encontramos el Río y tras cruzarlo zigzagueando en varias ocasiones, la última junto a la Presa, comenzamos el ascenso por la ladera, a través de una vereda. En algunos tramos con solera empedrada al estilo de las antiguas calzadas romanas, que de forma serpenteantes, para librarse de forma más fácil el desnivel, nos conduce hasta el "Tajo de las Moriscas", uno de los puntos más elevados del sendero, con un corte casi vertical y a una altura impresionante nos muestra una panorámica que nos perite contemplar desde Sierra Nevada, a Filabres, La Jairola, el Río y el casco urbano de Abrucena. El paisaje es ahora diferente, nos encontramos rodeados de Chaparros, Jara, Tomillo y hasta algún Enebro que no es muy común por esta zona. A unos 350 metros está el "Tajo de la Olivilla", desde donde se inicia un descenso de unos 200 m, algo complicado, a través de la vereda casi esculpida en piedra, que nos conduce a la Presa y la Balsa de la Olivilla que sigue en uso. Siguiendo la Acequia homónima llegamos hasta el Castillejo, ruinas de una antigua fortaleza árabe que conserva un aljibe. Comenzamos entonces el descenso, pasando por "La Cortijilla", antigua Balsa de riego que, hasta principios de las años 90, era usada como "piscina municipal" para los jóvenes de Abrucena. Al finalizar la bajada se cruza el río y a través del Callejón de la Caracola, entramos en el casco urbano y por el Callejón Agosto, de nuevo estamos en la Plaza de Andalucía, conde finaliza el sendero.